El “día de Compadres”, es el apéndice de una fiesta mucho más grande celebrada en el mundo andino y que se conoce como “los Carnavales”. Al igual que en otras parte del planeta, este “festival de la carne” se caracteriza por los disfraces, personajes, juegos y desfiles en las calles. Sin embargo, su rostro andino reclama elementos de nuestra geografía y cultura viva. Uno de ellos es el día de compadres que se celebra dos jueves antes de los carnavales, reuniendo a los amigos que han formado fuertes lazos de unidad. En los Andes el compadre o la comadre son personajes muy queridos y apreciados en el seno de una familia. Representan una segunda paternidad y se van incrementando en los momentos más importantes como el bautizo, comunión, graduación,  o matrimonio. Por ello se escoge de entre los amigos o la familia a los más cercanos porque con ellos se ha de convivir como reclama el Ayllu (comunidad) y el Ayni (reciprocidad). La fiesta se vive con algarabía y las chicherías se visten de globos y serpentinas. La gente se divierte echando mixtura o polvos de colores. En los barrios más tradicionales se podrá ver muñecos de personajes que retratan a “los compadres” pero también la sátira entre los parroquianos donde a veces se retratan políticos. También se juega con agua u otros elementos e incluso algunos nuevos como la espuma. Son los días previos a la fiesta más grande que es el carnaval cusqueño, pero no sin antes celebrar a “las comadres” que también tendrás un jueves especial la siguiente semana.

Escribe Pavel Ugarte.